Keko y Maribel

«En casa», era lo que querían Keko y Maribel y en cuanto vi su jardín, no lo dude ni un momento. Sabía que el cenador era un lugar importante para ellos y lo «convertimos» en el centro de la Ceremonia. Fue una boda muy emotiva en la que los invitados, no eran invitados, eran parte de su Gran Día. Nunca la olvidaré. Gracias por dejarme acompañaros en este maravilloso viaje.