Introducción

Cuando mi hijo era pequeño, por la noche antes de dormir solía contarle un cuento, pero lo que nunca faltaba era el “cuento de mamá”. Él me decía tres palabras y yo inventaba el cuento con esas tres palabras. Me arrepentí muchas veces de no haberlos escrito porque a las semanas, el pedía que le repitiese alguno y a pesar de mis esfuerzos por recordarlos siempre se enfurruñaba diciéndome que antes al Capitán de ese barco no le pasaba eso, o al superhéroe que inventaba tenía otro super poder.

Pues con este blog quiero hacer algo parecido, por supuesto que quiero ayudar, aconsejar o inspirar a alguien, pero de una manera distinta. Quiero contar historias, historias vividas en primera persona, historias contadas, historias que de alguna manera lleguen al mismísimo corazón porque de eso se trata, ¿verdad?